Cómo y por qué cambiar el sexo de tu protagonista

CATEGORÍAS:

¿Importa el sexo de tu protagonista?

Año 1979. Paul Newman es el teniente Ripley en Alien: El Octavo Pasajero. La película triunfa en taquilla y se convierte en obra de culto.

Año 2020. Se anuncia el remake de Alien: Ripley será una mujer. Las redes sociales estallan. La mayoría de las críticas son de hombres. «¿Cómo va ser Ripley una tía?», dicen unos. «Están destrozando nuestra infancia», protestan otros.

Pero la productora no contrata a Newman. Demasiado caro. Contra lo esperado el papel acaba siendo de Sigourney Weaver. Así nace un personaje femenino realista y con carácter.

En el cine de acción contemporáneo hay guerreras que suenan irreales.

Ripley no vuela ni tiene superfuerza ni es experta en artes marciales. Es una mujer corriente contra un monstruo. Aquí hay una lección para los guionistas: si quieres o necesitas un personaje femenino fuerte convierte al protagonista en mujer.

El problema para el público –en especial, el masculino– es que está acostumbrado a que los héroes sean hombres. Y cuando estos son héroes de la infancia les resulta molesto que tenga el rostro de una mujer en nuevas versiones.

Considerar que el héroe clásico debe ser un hombre de manera necesaria es un pensamiento pobre. El cambio de sexo no «destroza la infancia». Las películas originales permanecen inalterables. No se pinta encima de ellas. El público crítico ignora que con frecuencia los personajes cambian del guión a la producción: de raza, de sexo, de edad…

Que Las Cazafantasmas tengan vaginas no altera ni tergiversa la historia original. El argumento de Cazafantasmas es simple: cuatro personas se quedan en paro y montan una empresa que atrapa fantasmas. Estos personajes pueden ser lo mismo hombres que mujeres.

Considerar el cambio de sexo de un personaje puede ser un juego interesante. Pero el cambio no debe obedecer al capricho o sí. Quién sabe. Pero hay casos en el que el cambio de sexo no es una decisión valiente sino cobarde u oportunista.

No es buena idea

Cuando el sexo de tu protagonista cambia
Veronica Mars

Por puritanismo

Convertir al doctor Watson en mujer es una decisión cobarde en Elementary .

Cuando hablar de la homexualidad dejó de ser tabú en los medios se especuló que Holmes y Watson eran pareja. Estas teorías se deben a que Conan Doyle apenas escribió de las vidas privadas de sus personajes. De las elipsis surgieron las especulaciones que pocas películas y series han esquivado.

Que Lucy Lu sea mujer evita la especulación del espectador de Elementary. (¿Para cuándo un detective homosexual que sea el protagonista?) Es un cambio que tergiversa la amistad entre ambos personajes y que crea, se quiera o no, «una tensión sexual no resuelta» innecesaria. Una decisión valiente hubiera sido convertir a ambos personajes en mujer o que la mujer fuera Holmes.

Por mercado

El agotado Hollywood considera hace caja produciendo remakes con cambio de sexo. Pero algunos cambios pueden tergiversar el sentido de la historia.

Un par de seductores interpretado por Michael Caine y Steve Martin es hilarante porque muestra cómo dos hombres pomposos que parecen comerse el mundo llegan a extremos ridículos para seducir a una mujer.

El remake llamado Estafadoras compulsivas con Rebel Wilson y Anne Hathaway no ha funcionado porque sus personajes carecen de la pomposidad y el engreimiento que generalmente están asociados al género masculino. Reírse de la femme fatale rara vez funciona.

Es buena idea

Cuando el sexo de tu protagonista cambia
Pitch Perfect.

Explorar posibilidades

Es interesante cuando el cambio de sexo abre nuevas posibilidades dramáticas. Un ejemplo es la serie Gentleman Jack. Ambientada en el siglo XVIII, tiene a dos mujeres como protagonistas de una pasión romántica. Una época difícil para expresar el amor homosexual. Es cierto que Gentleman Jack está basado en una historia verdadera, pero sirve como ejemplo de que el cambio de sexo puede abrir nuevos caminos creativos y potenciar el drama.